“Saberse quedar” en una relación es una preocupación de las parejas del siglo XXI; la duración de las relaciones de noviazgo, unión libre o matrimonio, es cada vez menor. La tolerancia a los defectos de la persona con quien escogemos, disminuye. Ya no somos capaces de quedarnos y dejamos la relación para involucrarnos en otra que, tal vez, durará aún menos.
¿Por qué queremos dejar la relación? ¿Por qué nos quieren dejar? Son preguntas que debiéramos hacernos constantemente, antes de pretender romper de manera impulsiva en un arrebato emocional. Tenemos que preguntarnos también, qué es lo que debemos cambiar en nosotros mismos para mejorar la relación. No debe olvidarse que, mantener una relación en estado de felicidad, es muy importante para una vida plena.
Aquí se presentan algunos temas importantes para el sostenimiento de una relación de pareja sobre fundamentos firmes:
- La comunicación es una condición indispensable para tener una relación sana. Las parejas que permanecen tienen la capacidad de dialogar constantemente, escuchándose atentamente el uno al otro sobre los temas de mayor importancia que comparten, como son la educación de los hijos, el sostenimiento económico del hogar, la salud y los planes a futuro. Tratar de tener unos minutos en los que se discute de manera profunda estos temas pueden permitirnos una conexión a largo plazo con nuestra pareja.
- Interés por el otro. Es muy importante mantener el interés con respecto a las actividades de nuestra pareja. Tratar de sentir siempre lo que él o ella sienten cuando están en problemas laborales y dar apoyo proporciona seguridad y muestras del deseo de permanecer en la relación.
- Cada miembro de la pareja debe actuar responsablemente en lo que le toca, pero el otro debe ayudar y dar soporte activo.
- La intimidad, es decir, compartir los sentimientos y dar muestras de afecto positivo de manera constante, es clave para la permanencia. Esto implica, claro está una vida sexual satisfactoria.
- Permanecer implica el desarrollo de un sentido de “estamos juntos”. Esto incluso debe ser instintivo e inconsciente. Se sabe que se pertenece a una relación cuando se piensa en función de “ambos”. A nuestra pareja le cuesta menos trabajo quedarse si tiene la intuición de que “estamos juntos”, pase lo que pase.
- Las relaciones de pareja son interdependientes. Uno depende del otro.
- Saber pedir ayuda cuando se necesita es esencial. Los buenos consejos y experiencia tanto de personas que han resuelto sus crisis de pareja como de terapeutas especializados puede llevar a buen puerto una crisis.
